Demostrando una gran visión de futuro, el pasado año el gigante del comercio electrónico Amazon abrió una sección en su MarketPlace Americano dedicado exclusivamente a vender impresoras 3D y todo el material asociado: filamento, software, libros, etc. En otras palabras, todo lo necesario para que sus clientes puedan imprimir sus propios productos.
Háztelo tú mismo
Recientemente, Jeff Bezos CEO & Fundador de Amazon, ha revelado su intención de cambiar el modelo de negocio de la venta online tradicional por un nuevo modelo totalmente disruptivo. En estos momentos, la compra de cualquier producto “físico” en su MarketPlace desemboca en toda una serie de procesos logísticos, con el correspondiente coste dependiendo de las condiciones de entrega, y que implica a toda una serie de actores: almacenamiento, transporte o incluso lo experimentos que se están haciendo para la entrega a través de drones (aviones no tripulados).
El nuevo modelo que ha implantado como ‘piloto’ es la venta del fichero que tiene el diseño en 3D del producto que el cliente ha comprado. Con el auge del DIY («do it yourself» o hazlo tú mismo) los consumidores finales los podrían imprimir en cualquier momento y en el comodidad de su casa, sin esperar a los mensajeros, o lo novedosos drones, con horarios relativamente flexibles. Y, además, la idea es cerrar todo este ‘ecosistemas digital 3D’ con la venta de sus impresoras 3D.
Realmente hay que estar preparados para, en vez de productos, comprar ficheros con diseños de productos en 3D, y hacérselo uno mismo en casa con nuestras impresoras 3D? ¿A quién le puede afectar este nuevo modelo de negocio? ¿Estamos preparados para pensar en comprar productos digitales y NO productos físicos? ¿Quién es el que tiene un mayor beneficio: el usuario final o Amazon? ¿Se abre una nueva demanda de empleo para los diseñadores en 3D?
Está claro que esto no va suceder de la noche a la mañana pero veremos cómo evoluciona el mercado en los próximos años.